Dentro del marco de tu viaje a Europa, existen muchos pero muchos lugares que debes visitar, uno de ellos es sin dudas Edimburgo la capital de Escocia.
Siendo una de las ciudades más bellas del continente europeo, quedarás asombrado por su increíble emplazamiento, su rico patrimonio arquitectónico y su virtud cultural.
El fascinante casco antiguo de la ciudad destaca por su paisaje místico y su extraño trazado que hace un fabuloso contraste con el ordenado trazado cuadricular de su parte más moderna. Recordemos que las dos zonas de la ciudad han sido declaradas por la UNESCO como patrimonio de la Humanidad.
El recorrido por la ciudad podrás realizarlo simplemente caminando y recomendamos que lo inicies por el Castillo de Edimburgo que es una atracción turística de nivel. Una estructura romántica emplazada al oeste de la Milla Real.
Recordándonos la sangrienta historia de invasiones inglesas, se encuentra la residencia de Holyrood cuyos cimientos fueron construídos en el año 850 a.C. Algunas de las partes construídas más antiguas datan del año 1130 y actualmente funciona como establecimiento para el ejercito escocés.
Desde esta vía se podrá apreciar el asombroso paisaje típico que permanece casi intacto desde el siglo XVII. También si tienes un buen estado físico, recomendamos escalar la montaña Calton, donde podremos descubrir una hermosa panorámica de la capital.
Apreciaremos también los fantásticos monumentos de la ilustración que datan de la época en que Edimburgo era considerada como la Atenas del Norte.
Otro logar que no deberemos pasar por alto en nuestra visita a Escocia es Greyfriars Kirk, sitio donde fue firmada la Alianza Nacional del 1683.
